Moda y feminismo mainstream

Moda y feminismo mainstream

Almodis Nogués

02/02/2018

Almodis Nogués

Esta foto no necesita titulo ❤️ #10premisgaudí #muchoamor

Una publicación compartida de Aida Domenech (@dulceida) el

Feminismo de mercado, cultura mainstream, #Feminismochic, cultura de masas… Todos estos conceptos son algunos de los que he podido leer en decenas de artículos de opinión sobre el debate: moda y feminismo.

He podido comprender y analizar que las autoras se ciñen en dos perspectivas: el favor que puede hacer al feminismo este tipo de negocio, y la perspectiva que juzga y ve impermisible que se use un movimiento político como producto de beneficio.
Todos los artículos – con escasas excepciones – se dirigen hacia una misma dirección: cuando se saca beneficio de algo tan importante como el feminismo, deja de hacer favores a la sociedad.

suscribete al periodismo feminista

Este argumento es básico para cualquier iniciada al feminismo, pero se tiene que mirar mucho más allá, ya que carece de esencia en sí mismo. Sí, es lógico que las imágenes si no van acompañadas de un mensaje real dejan de ser relevantes, y pasan a ser un simple producto.

Tenemos el ejemplo de Dulceida, que sacó camisetas con mensajes feministas. Y sí, de Christian Dior, cuyo diseñador aprovechó muy bien la época de cambio que estamos viviendo para estrenar otra camiseta del mismo calibre. Y por si no fuera poco, sí, ahora puedes ver ochenta Frida Kahlo serigrafiadas en las distintas marcas de Inditex, de Amancio Ortega.

Lo que realmente nos tenemos que preguntar es el motivo por el cual se ha empezado a mercantilizar con el feminismo, sus referentes, y sus eslóganes de los años 90.

Una razón podría ser el hecho que la industria textil ha jugado muy bien sus cartas. Este argumento se sostiene con el aumento de ventas de marcas de fast fashion como Mango o H&M, que a través de mensajes como Girl Power han conseguido alejar cualquier polémica sobre discriminación o machismo. Lo han conseguido a partir de estudios de mercado que responden a lo que ya hace unos diez años se está viendo: las chicas de hoy están más empoderadas, y son más conscientes de “luchar” por un feminismo igualitario que rompa con el techo de cristal.

Y sí, también responde a que la educación está tomando las riendas por lo que hace a perspectiva de género, aunque muy suavemente. Hace muchos más talleres sobre qué significa ser feminista, y el respeto entre ambos sexos.

No obstante, como anécdota, a nivel mundial tenemos claro que en Hollywood está habiendo un cambio. Actrices como Natalie Portman salen a confesar los actos de machismo que han vivido en su vida.

Pero qué pasa con estos cambios, tanto a nivel mundial, económico, social y cultural: la realidad.
Una realidad que se basa en la estremecedora noticia de que una mujer en España es agredida sexualmente cada ocho horas según el Ministerio de Interior. Este dato sólo nos saca de dudas sobre cualquier pizca de progreso en el campo del feminismo.

El machismo avanza, el terrorismo sexual aún más, y por muchas camisetas que se vendan con mensajes feministas, sin una base real, sin una concienciación real en las aulas, en institutos y universidades, no lograremos hacer un cambio real.

Y es que como dice Simone de Beauvoir, una mujer se hace no se nace. Serán las experiencias cotidianas que nos harán contradecirnos para entender que el problema no está en cuantas camisetas se vendan, sino en por qué el patriarcado está aprovechando cualquier flaqueza y encima se sale con la suya.

Download PDF
master violencia de género universidad de valencia

Artículos relacionados

Últimas publicaciones

ayuda a Gaza
Download PDF

Título

Ir a Arriba