‘Better Things’: El día a día de una madre feminista

‘Better Things’: El día a día de una madre feminista

El 28 de febrero, 'Better Things', una serie en la que no encontramos a la clásica madre soltera y trabajadora que hace malabares para conciliar vida privada y familiar y que o falla estrepitosamente, estrena su tercera temporada.

13/02/2019

Iris César del Amo

 

En la imagen se ve a una mujer tumbada boca abajo sobre una cama, con los pies apoyados sobre la ventana que hay al lado.

Imagen de FilmAffinity

Esta vez no encontramos en pantalla a la clásica madre soltera y trabajadora que hace malabares para conciliar vida privada y familiar y que o falla estrepitosamente o, como por arte de magia, consigue llevar paz y tranquilidad al hogar; esta vez añadimos feminista al combo y nos queda Better Things.

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La incorrecta Sam (Pamela Adlon, protagonista y creadora de la serie) no solo pelea por su carrera como actriz en el cruel Hollywood, sino que también lo hace día a día por educar a sus tres hijas y por convivir de la forma más pacífica posible. La maternidad puede ser una lucha, una lucha que está muy presente en Better Things. En cada capítulo se hace evidente la constante del cuidado y la educación en contraposición con el cansancio y la independencia. Sin dar soluciones ni consejos gratis, se acerca a los problemas de ser madre con humor y con un grito histérico y desesperado.

Es una serie sin tabús ni tapujos. Y si la serie no tiene pelos en la lengua, tampoco los tiene su protagonista, que habla abiertamente sobre la regla en un seminario sobre empoderamiento femenino en la escuela de sus hijas o sobre la menopausia, el sexo y las relaciones, en las que no duda en poner los puntos sobre las íes cuando es necesario:

¿Por qué siempre hay que tener tanto cuidado con los sentimientos de un hombre? Uh, no le hagas daño. ¡Sus sentimientos son importantes! Se supone que sois muy fuertes y sois unos cobardes. En cuanto una mujer es mínimamente dura con un hombre o incluso mínimamente sincera, es una zorra”.

Es un serie actual, con temas actuales y preocupaciones feministas actuales. En el capítulo cuatro de la segunda temporada, (SPOILER) Sam le cuenta a un amigo con un gran sofocón que ha conocido a un hombre que le gusta y que “le está jodiendo la vida” porque no quiere que le guste. Es una situación con la que muchas feministas pueden sentirse identificadas: esa ilusión y sonrisa tonta que te impulsan y toda la teoría y experiencia que te hacen sacar el cuestionario morado, sospechar y huir.

Quizá también por su actualidad y visibilización, se aventura a tratar superficialmente la transexualidad. Sin embargo, en otros capítulos en los que no se habla específicamente del tema, puede llegar a ser irrespetuosa y a herir sentimientos.

A pesar de sus claros ideales, la serie se vio afectada tras la segunda temporada por el escándalo de acoso sexual de Louis C.K., creador y guionista junto a Pamela Adlon. Al contrario que otros proyectos en los que también participaba, como la también magnífica y feminista One Mississippi, Better Things ha conseguido sobrevivir a su sombra de vergüenza gracias a que la idea original de la serie está basada en la vida real de Pamela Adlon y a que ella misma dirigió todos los capítulos de la segunda temporada, tomando más control sobre el proyecto. De este modo, la productora eliminó el nombre de Louis C.K. de la serie y siguió adelante con la tercera temporada, que verá la luz el 28 de febrero.

Better Things constituye el retrato fiel del duro trabajo que conlleva ser una madre trabajadora, moderna e independiente y las contradicciones que engloba el trabajo de una feminista criando a tres hijas. Así es capaz de acoger y ensalzar esas contradicciones que todas vivimos. Como feministas, como mujeres, como madres.

 

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