Mi experiencia con las bragas menstruales

Mi experiencia con las bragas menstruales

Me compré unas bragas menstruales en un Verkami y quería compartiros mi experiencia.

24/11/2017

Elena Galán

 

Me compré unas bragas menstruales en un Verkami y quería compartiros mi experiencia.

La primera vez que las usé era un segundo día de regla. Normalmente uso copa menstrual, tengo dos modelos: una copa menstrual más blandita y otra más dura; las voy alternando. Normalmente el primer y segundo día me las tengo que cambiar cada 3 horas, a veces 2, a veces 4. A pesar de llevar más de 10 años usando la copa aún hay días en que no atino a colocarla bien y entre que se me desborda o mi torpeza siempre acabo manchando, así que combino la copa con salvaslips de tela. Por supuesto tengo mis bragas de regla.

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Volvamos, la primera vez que las usé era mi segundo día de regla, las lavé a mano el día anterior (como indican para el primer uso) y me las puse. Ése día anduve fuera de casa prácticamente 20 horas, entre visitar a amigas a Badalona y bailar todas las fiestas del Poble Sec. ¡¡¡Las bragas menstruales sin copa aguantaron !!! Me la jugué un poco, pero la verdad es que fue una gozada no tener que ir lavando la copa.  Al día siguiente puse una lavadora y al quinto día de regla (tardan más que unas bragas sólo de algodón en secarse) me las puse sin copa. A las tres horas me habían traspasado. Anoté la diferencia. Mi flujo menstrual, cuando está acabando la regla, es mucho más sólido y baja a borbotones y más cantidad a la vez que los primeros días.

Compartí mis experiencias con mi hermana. También había participado en el Verkami y justo le llegaron las bragas menstruales en sus primeras semanas de embarazo. En esas semanas hay más cantidad de flujo, pero para su decepción las bragas menstruales enseguida le traspasaron.

Entonces decidí hacer un experimento. Teñí un cuenco de agua con remolacha, llené hasta la segunda marca mi copa menstrual rígido y luego lo vacié en las bragas menstruales. El agua se extendió y llegó hasta las costuras laterales, donde traspasó al otro lado rápidamente a través de ellas. En otra tanda del experimento, fui echando agua en menos cantidad. De los experimentos saqué estas conclusiones:

– Las bragas menstruales no son ciencia exacta, como no lo es el caudal del flujo menstrual. Es decir, no podemos controlar la cantidad de flujo que expulsamos cada vez, por lo tanto, a veces nos da la impresión de que aguantan más y otras menos, pero depende de cuánto flujo salga por vez para que le dé tiempo al tejido a absorberlo.

– La viscosidad del fluido. Si es muy poco viscoso y abundante (como el flujo de una embarazada de pocas semanas), se expandirá rápidamente por el tejido de algodón hasta llegar a las costuras y por los agujeritos donde pasan los hilos traspasará a la parte exterior. Si es muy viscoso (y tiende a sólido, como mis últimos días de regla) se acumulará en un lugar y si es mucho, pues probablemente llegue a traspasar.

Y mi reflexión personal ¿a qué sustituyen las bagas menstruales? Visto que no son ciencia exacta, para mí no sustituyen a la copa, pero sustituyen a los salvaslips de tela y las bragas de regla. En la foto adjunta podéis ver, a la izquierda las bragas menstruales, que son mis bragas de regla actuales, y a la derecha mis bragas de regla pre-menstruales.

Para mi experiencia con mi regla y mis sensaciones de primeros días de regla, ha sido muy gratificante poder usar unas bragas tan bonitas. No importa que se manchen, porque se lavan en lavadora con todo lo demás y se les va la mancha, si es que quedó mancha. He conectado con un deseo de manchar y que no importe, porque se disimula perfectamente y porque no tengo trabajo extra para limpiar. No sé si llegaré al siguiente paso de que no me importe que se vea la mancha, aunque se me ocurren performances divertidas y gamberras. El caso es que seguro segurísimo que si las combino con la copa no me traspasan aunque tenga pérdidas, ya sea porque me he puesto mal la copa, se me ha desbordado o se me ha movido.

La experiencia de la regla es muy personal y muy íntima, a cada una nos afecta distinto. Yo me vuelvo un desastrito emocional y físico, y si no se me desborda la copa seguramente se me resbala un poco mientras la saco para limpiarla. Y la sangre salpica unas bragas super elegantes y bonitas. Y no pasa nada.

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