¿Educad@s en igualdad?

¿Educad@s en igualdad?

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02/05/2016

Hablaigualdad

“La juventud es el período de lo posible”.

Ambrose Bierce

Una tarde cualquiera, después de “aterrizar” de nuevo en mi país de origen (uno de los considerados del ¿primer mundo?), andaba pensando en cómo había cambiado tal calle, cómo en marzo estábamos entrando en la ¡primavera!, cuando la conversación de unos adolescentes sentados en un banco, me devolvió a la realidad. Eran dos chicos y tres chicas de unos 13 a 17 años. Estaban planificando sus días feriados, y dónde iban a ir. No se ponían de acuerdo con qué iban a llevar y quiénes les iban a llevar. Ya llevaba andando un rato y me senté a escucharles en el banco de al lado.

Soy muy consciente de lo malo de la acción y al mismo tiempo, lo cotidiano de la misma. Oyéndoles empecé a recordar a los jóvenes con los que había tenido la suerte de poder trabajar en los diferentes países latinoamericanos en los que había vivido, y de cómo el lugar donde vives te influye en tu forma de ver y entender las cosas, tus preferencias, tus percepciones de los hechos o de lo “importante”.

“Adiós, guapa. Me llamas cuando llegues a casa, ya sabes, no te quedes mucho con estas, que como no tienen novio… a saber lo que van a hacer ahora, o dónde van a ir. Las pobres, no tienen a nadie que se preocupe por ellas y las cuiden, como yo a ti. Media hora, como mucho, mi niña”.

Saltó mi alarma interior, me puse alerta. ¿”Las pobres”?, ¿“las cuiden”?, ¿“a saber lo que van a hacer”?. Todas las palabras resonaban en mi cabeza y esperaba una contestación a esas frases, una llamada de atención. ¿Sería una broma? Y si así fuera, ¿qué clase de gracia es esa? Fueron segundos en los que por mi cabeza pasaron miles de posibles respuestas de una joven del siglo XXI, educada en la igualdad. Cuando mi sorpresa, fue una sonrisa tímida, con una mirada de asentimiento y aceptación.

¿¿¿¿Ehhhhh???? ¿Esto está pasando? Tus padres, tus tutores, aquellos adultos que se han encargado de tu educación, tus profesores, tu entorno más cercano que ha vivido en una sociedad patriarcal, ¿no te han transmitido nada?

Pero la cosa no termina ahí. La chica, vuelve al banco con sus amigas y les comenta: “Es genial, estamos mejor que nunca. A ver si tenéis suerte, y encontráis a alguien como José. Es mejor que estar saliendo todo el tiempo con uno y otro, esos no son buenos, ni tampoco para vosotras, ya sabéis lo que van a pensar. Yo os lo digo como amiga y porque os quiero.”

Sin palabras, no podía cerrar la boca. Por favor, mi cabeza iba a toda velocidad, amigas decidle algo… ¿”esos no son buenos”? ¿“ya sabéis lo que van a pensar”?

Mi sorpresa fue el silencio de las amigas, y de ahí se despidieron. Obvio, José estaría esperando.

Me faltó reaccionar, deseé haberme acercado a ellas y hablarles, plantearles preguntas, presentarles diferentes situaciones…

Llegué a casa y comencé a buscar datos, estadísticas, ONGs que trabajaran con adolescentes, artículos de opinión, noticias de actualidad… “el 95,3% de las chicas y el 92,8% de los chicos admiten haber ejercido violencia psicológica sobre sus parejas”[1].

“Creen erróneamente que si sientes celos de tu pareja es porque realmente la amas”[2] explica Marina Muñoz-Rivas, profesora de Psicología de la Universidad Autónoma de Madrid.

“Que en el amor -por su forma de idealizarlo- vale todo”, explica Diana Díaz, psicóloga y subdirectora del teléfono de la Fundación ANAR.

Actos de violencia son, por ejemplo, mirar el móvil de la pareja —un 62,9% de las chicas lo hace—, pegar a la pareja —un 28% de chicos lo hace—, difundir material como SMS o imágenes sin permiso —un 32,7% de chicos lo hace— o controlar todo lo que hace —un 45,3% de las chicas y un 47,6% de los chicos lo hacen—[3]

¿Qué estamos haciendo ante esta situación? Es cierto que existen jornadas, talleres puntuales, conferencias en IES, pero… ¿es suficiente?

 

[1] Datos de la Fundación ANAR (noviembre 2015)

[2] Violencia en el noviazgo: realidad y prevención’ (Pirámide): Marina Muñoz-Rivas; Pilar González Lozano; Liria Fernández González; Sandra Fernández- Ramos

[3] Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, un centro privado creado por la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD)

 

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