No somos casos aislados
Nota: Este artículo se enmarca en la sección de libre publicación de Pikara, cuyo objetivo, como su nombre indica, es promover la participación de las lectoras y lectores. El colectivo editor de Pikara Magazine no se hace responsable ni del contenido ni de la forma de los artículos publicados en esta sección, que no son editados. Puedes mandar el tuyo a participa@pikaramagazine.com. Rogamos claridad, concisión y buena ortografía.
Flor Vent
A las mujeres no sólo nos pegan nuestros novios
nuestros maridos, nuestros amantes.
También nos pegan en la calle
cuando nos dicen linda, mi amor
que bien te quedan los lentes
chau bonita, mami, mamita
no seas histérica.
No sólo nos violan los desconocidos
a la noche, cuando salimos del boliche
borrachas, y ay! que trolas.
También nos violan nuestros padres
un tío lejano que aparece poco en la familia
o el novio de mamá que superproteje.
Cuando desde las películas, las publicidades
los carteles de la calle, los cuentos infantiles
nos enseñan sobre el goce, nos dicen
si sos mujer, te gustan los hombres:
cuanto más fuerte, más protegida.
Cuanto más poder económico, más facilidad.
Cuanto más grande, más placentero.
Nos dicen virginidad, fidelidad
casamiento, ama de casa, hijxs
salario menor, ginecología sin respeto
violencia obstetrica, aborto ilegal.
Aprendé a cocinar
a lavar los platos de tu hermano
a decirle al pibe que se ponga forro
porque sino no lo hace.
Nos enseñan que si no tenemos plata para ir a bailar
no importa, porque las chicas entramos gratis
y con una meneada nos regalan un par de tragos.
Nos dicen que no caminemos solas de noche
que la calle está peligrosa
que si andamos en bici nos pongamos un shortcito
porque al primer vientito
el chabón del auto de al lado
te clavó el visto.
Nos enseñan a sentir culpa.
Culpa por comer
culpa por no tener el pelito lacio
culpa por no depilarnos
culpa por no maquillarnos
culpa por no tener pareja
culpa por no querer tener hijxs
culpa por decir que no.
Antes y después
nos dicen que nos callemos
que está mal
que se arma bardo
que te de vergüenza
que no te masturbes
que si estás menstruando no lo digas
que si te cogiste a alguien en la primera noche está mal
que si te golpean, te lo mereces
y que si no tenés ganas,
se hace igual y se finge.
Nos enseñan que el amor es un ramo de flores
una cena para dos
una canción de desamor
o una película romántica
donde la chica deja todo por el amor de su vida
que seguro es un amante
que a último momento
se manda alguna y la deja plantada.
Nos dicen eso, que existen los amantes.
Y que si tenemos uno, somos súper revolucionarias.
Porque el amor libre no existe
a ver si nos empoderamos
y asustamos a nuestros novios,
que sí, chicas
tienen miedo de perdernos.