Hey, hey, hey: esto es lo que pasa por ser bollera

Hey, hey, hey: esto es lo que pasa por ser bollera

Las críticas al videoclip del grupo chileno 'Los Tres' obvian que dos de los asesinatos son fruto de la lesbofobia.

13/01/2014

Lesbianas-Luis-Tosar

El artículo LOS TRES ERRORES (A propósito de la canción “Hey, hey, hey” del grupo chileno “Los Tres”) de Miguel Lorente se ha convertido en la referencia para analizar lo ocurrido con el ya famoso videoclip de Los Tres. Sí, el protagonizado por Luis Tosar. Pues bien, en las 983 palabras que escribe para el diario El País no nombra, ni para pasar por encima, que dos de los tres asesinatos que se producen en el videoclip son resultado de la lesbofobia más cruel y radical. Lorente no es, ni mucho menos, una excepción. Lo mismo pasa en Europapress y en el Mundo; también en ABC y en El Correo. ¿Lesbianas? ¡¿Dónde?! Lo peor que he leído, sin ninguna duda, es la narración que hacen de la escena en cuestión en El diario galego: “Tosar aparece en distintas escenas. En una de ellas, desenfundando una pistola después de sorprender en una infidelidad a la mujer con la que había mantenido relaciones. En la siguiente escena, ella y la persona que la acompañaba están muertas”

Ajá. “Ella y la persona que la acompaña están muertas”. Personas muertas, no. No son personas muertas. Son dos lesbianas asesinadas. ¿Que por qué tengo que creer que son lesbianas? Pues de la misma manera por la que todo el mundo ha creído que son heterosexuales: porque es una opción (¡Oh! ¡Dios! ¡El lesbianismo es una opción!) Una de las víctimas aparece besando el mismo número de veces a Tosar que a la otra mujer, ¿por qué he de inclinarme a pensar que la ‘relación’ lésbica es menos identitaria que la heterosexual? ¿Por qué se está deduciendo que Tosar asesina a estas mujeres porque una de ellas le ha sido infiel?

Tanto el videoclip como los discursos que se están produciendo desde los grandes medios de comunicación invitan a deducir que la práctica lésbica de las dos mujeres, que después son asesinadas, se produce para provocar al macho de la escena o, al menos, provoca. Nadie parece observar la mirada de complicidad entre ambas en un momento del videoclip. No tienen pinta de estar enrollándose para joder a nadie sino porque se desean. Sin embargo, esa mirada heteropatriarcal que tenemos encriptada nos dice otra cosa, nos dice que se enrollan para provocarle. Y el juego de la provocación es muy arriesgado. Tosar, desde su postura de macho alfa, sólo tenía dos opciones: matarlas o meter su polla entre ellas. De todas maneras, si alguien sigue apostando por la teoría de la infidelidad, no hay que dejar de recordar que es un privilegio masculino, que un tipo duro no puede consentir que ‘su mujer’ le sea infiel.

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Invisibilidad-Luis-Tosar-Lesbianas

Pero Tosar no sólo representa a un asesino lesbófobo en este videoclip. Su papel consiste en buscar al otro tipo que asesina a una mujer (el cadáver que baila). Tosar es un defensor de ‘las mujeres’ –como tantos y tantos…–, pero una cosa son ‘las pobres mujeres débiles’ y otra cosa es ‘tu mujer’. Esa es otra historia. El típico dandy, que presume de cuidar y defender al sexo débil mientras su mujer espera paciente en casa. ¿El típico dandy os suena lejano? El adolescente poligonero que exige fidelidad a su novia, que no la deja salir de casa sin él, pero que cada fin de semana se ‘enrolla’ con una mientras ella llora y llora. El hippy de la canción de Puro Luego, que habla de amor libre y te monta la escenita si te enrollas con su amigo. La bollera feminista que se pone celosa si bailas con otra.

Sólo sabemos esto: Tosar pilla enrollándose a una tía con la que él se ha enrollado antes. No parece que les una ninguna relación afectiva más. No sufre al ver a la persona que ama en manos de otra y pierde los papeles. Eso es lo que hace el otro, el que mata al cadáver que luego baila. Tosar mata a las dos mujeres porque se enrollan entre ellas. Las mata porque no puede consentir que se ponga en entredicho la influencia de su polla.

“Esto es lo que pasa por querer o por amar”, dice la canción. Esto es lo que pasa por desear a otras mujeres. A ver si Luis Tosar se anima y pide perdón también por esto.

PD: No hago ninguna referencia a la brutalidad de la violencia machista del videoclip porque eso ya está hecho.

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